San Apolinar fue el primer obispo de Rávena (o Ravena) y el único mártir de dicha ciudad cuyo nombre se conoce. Según las actas de su martirio, Apolinar nació en Antioquía, dondé fue discípulo de san Pedro, y el Príncipe de los Apóstoles le nombró obispo de Rávena. Pero se trata de una fábula del siglo VII, inventada para dar prestigio a la sede episcopal de dicha ciudad. San Apolinar fue uno de los mártires más famosos en la Iglesia primitiva, y la gran veneración que se le profesaba es el mejor testimonio de su santidad y espíritu apostólico, pero ello no nos autoriza a prestar crédito a la leyenda.
Según ésta, Apolinar curó milagrosamente a la esposa de un oficial, y tanto el marido como la mujer se convirtieron al cristianismo. También sanó a un sordo llamado Bonifacio y obtuvo tal cantidad de conversiones, que las autoridades le desterraron de la ciudad. Entonces, Apolinar fue a predicar el Evangelio a Bolonia, donde convirtió a todos los miembros de la familia del patricio Rufino. Partió al exilio nuevamente y durante la travesía, naufragó en las costas de Dalmacia, donde fue maltratado por predicar el Evangelio. Apolinar volvió tres veces a su sede, y otras tantas fue capturado, torturado y desterrado nuevamente. En su cuarta visita el emperador Vespasiano publicó un decreto por el que ordenaba el destiero a todos los cristianos. San Apolinar consiguió esconderse algún tiempo con la ayuda de un centurión cristiano, pero finalmente fue descubierto por el populacho, que le condujo al barrio de Classis, donde le golpeó hasta dejarle por muerto.
San Pedro Crisólogo, el más ilustre de los sucesores de san Apolinar, le calificó de mártir en uno de sus sermones, pero añadió que Dios preservó la vida de Apolinar durante largo tiempo para bien de su Iglesia y no permitió que los perseguidores le quitasen la vida. En tal caso, sólo puede decirse que fue mártir a causa de los tormentos que sufrió por Cristo, lo que habitualmente llamaríamos un «confesor».
En sus sermones, san Pedro Crisólogo afirma que san Apolinar fue obispo de Rávena y mártir; prácticamente a eso se reduce todo lo que sabemos sobre él. La biografía de Acta Sanctorum, julio, vol. V, no es ciertamente anterior al siglo VII, y no parece que se apoye en una tradición auténtica. Mons. Lanzoni, Le fonti della leggenda di Sant'Apollinare di Ravenna (1915) y Le diocesi d'Italia (1923), pp. 455 as., discute a fondo el problema. En el canon de la misa del rito de Milán se menciona a san Apolinar.
En la imagen: el bellísimo mosaico bizantino del siglo VI que muestra la figura de san Apolinar, obispo, en uno de los ábsides de la basílica a él dedicada: San Apollinar in Classe, en Rávena.
Abel
Como se desarrollan los patronazgos en los santos? Es solo que alguien de cierta profesión se encomienda al santo, y como funciona la intervención, otro de la misma profesión lo hace y así sucesivamente? San Apolinar patrono de los fabricantes de agujas? Gracias adelantadas. Luis Eugenio Sanchez
Hola. Tengo escritos dispersos sobre el tema, pero la idea que expreso siempre sobre los patronazgos es la que explico en este artículo en que me preguntan por el santo patrono de la liturgia: https://www.eltestigofiel.org/index.php?idu=pr_12588
Las listas de patronazgos de cada santo se nutren de pura tradición. Muchas veces los rasgos particulares del patronazgo tienen que ver con alguna anécdota tomada de las leyendas del santo. En el medioevo era común que la vida del santo se desarrollara no en forma de biografía, sino más "novelada", en forma de "historia para leer" (que eso quiere decir leyenda). Las leyendas de los santos solían incorporar muchos detalles particulares, a veces ciertos y a veces de relleno colorido para hacer contable la historia, pero esos rasgos pasaban a la tradición popular... y cuanto más pintoresco y extraño, más fácil es que se convirtieran en foco de atención de la devoción popular.
No te puedo decir por qué llega san Apolinar a ser patrono de los fabricantes de agujas, quizás tenga relación con alguna de las torturas a las que lo sometieron. Muchos patronazgos se derivan de las torturas recibidas: santa Apolonia será patrona para el dolor de dientes, porque le arrancaron lso dientes, santa Lucía de los ojos, por lo mismo (aunque ahí juega el nombre también: Lucía, la luminosa); una santa a la que le arrancaron los pechos deviene patrono contra los problemas de mamas, etc...
En la "Leyenda dorada" de Jacobo de la Vorágine (siglo XIII), un libro enormemente influyente en la piedad popular, no figura nada de agujas en relación a Apolinar, pero eso no significa que no provenga de algún rasgo de la leyenda no recogido allí.