oma (Italia)
El Papa Juan Pablo II recibió esta mañana en audiencia personal a cinco de los obispos españoles que se encuentran en Roma durante su quinquenal visita Ad Limina Apostolorun. El arzobispo de Tarragona, monseñor Jaume Pujol Balcells, primado de la provincia catalana, ha sido el último en ser recibido. A la salida ha contado la experiencia de su primera visita a Roma como obispo para la Agencia Veritas.
?¿En todas las parroquias hay sacerdotes?? Ésta ha sido una de las preguntas más directas que recibió esta mañana el arzobispo tarraconense del Santo Padre durante su entrevista personal que duró, según declaró el arzobispo para Veritas ?casi un cuarto de hora, aunque tenía la impresión de que el tiempo se me ha pasado volando?.
El arzobispo profundizó sobre el tema explicando la situación de la archidiócesis en la que ?intento aprender mi papel, porque llevo poco tiempo en el episcopado?. ?Una de mis ocupaciones-preocupaciones son los seminaristas? explicó monseñor Pujol. ?Le he explicado al Santo Padre cómo me voy con ellos de vez en cuando a la montaña, como hace él, y he recibido una gran sonrisa como inmediata respuesta?.
El clero tarraconense es una de las preocupaciones del Papa, como lo son los mayores. ?Le he contado dentro del campo de la salud, cómo llevamos temas como los hospitales o la atención a las personas mayores a lo que he recibido continuas expresiones de asentimiento?, explicó.
Otro de los grandes temas es el de la juventud: ?Al profundizar sobre el campo del apostolado con la gente joven le he anunciado el próximo encuentro que tendremos en los primeros días del mes que viene con ellos?.
La educación también ha sido tema de conversación: ?Tenemos una gran ilusión en los colegios. En la actualidad tenemos cuatro diocesanos y dos religiosos?, puntualizó el arzobispo.
?Lo más importante de estos días es el sentido de comunión entre nosotros los obispos?, aclaró monseñor Pujol, ?lo demás son los problemas normales de la acción pastoral de una diócesis, problemas que para mí no lo son, son más bien ocupaciones que preocupaciones?.
Como presidente de la Conferencia Episcopal Tarraconense, le ha pedido al Papa una bendición específica, además de para su archidiócesis ?Mi ocupación es que la Iglesia en Cataluña sea cada vez más viva, que sepamos predicar y que afrontemos las cuestiones importantes como la formación de los laicos, que contemos con institutos de ciencias religiosas más eficientes?, explicó monseñor Pujol.
El arzobispo le ha regalado al Papa una imagen de la Virgen del Clautre, también llamada Mare de Déu de la Llet, por representar a la Virgen dando el pecho al Niño patrona de Tarragona.
También le mostró los recordatorios de su reciente ordenación episcopal del 19 de septiembre pasado, donde aparece representado el martirio de san Fructuoso. ?Le he explicado que en un momento de las actas del mártir se cuenta cómo un soldado le pide a san Fructuoso que rece por él, a lo que contesta: Tengo que rezar por la Iglesia de Oriente y de Occidente, dando testimonio así de la universalidad y unidad de la Iglesia?, concluyó.